Dentro de la economía y la sociedad mexicana, las mujeres emprendedoras juegan un papel importante. De acuerdo con la Radiografía del Emprendimiento, edición Mujeres, elaborada por la ASEM, 21% de las empresas en México fueron fundadas exclusivamente por mujeres, quienes se han convertido en agentes transformadoras de la economía nacional.
Sin embargo, este sector enfrenta una serie de desafíos, dentro de los cuales destaca el reto de mejorar su capacidad de producción y operación, que señalaron cerca de la cuarta parte de entrevistadas (22.3%), como una de las oportunidades pendientes. Pensando en esa problemática, compartimos una serie de claves útiles a considerar.
Así que, si eres emprendedora que tiene ante sí ese reto, te invitamos a seguir leyendo, para conocer las recomendaciones:
1. Busca fuentes alternativas de financiamiento
Uno de los principales impedimentos de las mujeres emprendedoras para poder establecer mejoras y escalar un negocio es la falta de financiamiento: si no cuentas con el capital necesario, no puedes invertir en la infraestructura necesaria para impulsar tu producción, monitorear su desempeño e implementar un sistema de mejora continua.
Sin embargo, puedes aprovechar los apoyos a fondo perdido. Los gobiernos suelen ofrecer diversos programas de financiamiento de este tipo, especialmente para mujeres emprendedoras. Investiga a fondo las opciones disponibles en tu estado o municipio, y no dudes en postularte para obtener recursos que te permitan adquirir maquinaria, equipos, capacitación o incluso capital de trabajo.
La ventaja de este tipo de financiamiento es que no tienes que devolver los recursos recibidos, por lo que tiene un impacto realmente positivo en tu negocio.
2. Establece metas, monitorea y evalúa
El siguiente paso importante es definir objetivos claros, establecer un plan de acción detallado y asignar responsabilidades de manera eficiente. Esto es porque un buen sistema de organización permite a los miembros del equipo tener una visión clara del trabajo que se debe realizar, para evitar la duplicación de esfuerzos y maximizar el uso de recursos.
Por otro lado, es necesario establecer indicadores clave de rendimiento (KPIs) para medir el progreso y la eficiencia del plan de mejora de los procesos productivos. El seguimiento continuo de estos parámetros permite identificar áreas de oportunidad, tomar decisiones oportunas y realizar ajustes en la estrategia, siempre que sea necesario.
3. Implementa tecnologías innovadoras
La innovación tecnológica es un aliado fundamental de las mujeres emprendedoras para optimizar la producción y aumentar la eficiencia en tu negocio. Explora las herramientas digitales disponibles, como software de gestión empresarial, plataformas de comercio electrónico o sistemas de automatización, que te ayudarán a agilizar procesos, reducir costos y mejorar la atención al cliente, incluso el ambiente laboral.
Por ejemplo, implementar un sistema eficiente de gestión de inventarios permite mantener niveles óptimos de stock, evitando tanto el exceso de inventario, que genera gastos innecesarios, como la escasez de artículos que te impide responder a tus clientes. Incluso, puedes anticipar compras para anticipar picos de ventas.
Esto se traduce en una mejor planificación de la producción, reducción de costos y mayor capacidad de respuesta a la demanda.
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3. Optimización del layout para mayor eficiencia
Un layout organizado y eficiente del espacio de trabajo puede mejorar significativamente el flujo de producción y reducir el tiempo de inactividad. Es importante considerar la ubicación estratégica de maquinaria, herramientas y áreas de trabajo para minimizar movimientos innecesarios y optimizar el uso del espacio disponible.
Esto implica mapear cada etapa de producción, también conocida como análisis de flujo de trabajo, para identificar redundancias y cuellos de botella, y aplicar principios de manufactura esbelta. Para ello, se sugiere considerar algunos puntos importantes como:
- Realizar un diseño basado en procesos, para minimizar el movimiento necesario y facilitar el flujo natural de las operaciones.
- Utilizar el espacio vertical y horizontal para liberar espacio, garantizar seguridad y permitir el movimiento cómodo.
- Realizar una zonificación eficiente, al dividir los espacios, según el tipo de actividad que se realiza en cada uno.
- Crear un diseño flexible y escalable, que pueda adaptarse a cambios y que ofrezca capacidad de escalar rápidamente.
- Asegúrate de que el layout promueva un ambiente de trabajo seguro y ergonómico.
- Haz pruebas y ajustes, luego de observar cómo funciona en la práctica.
- Apóyate en software de diseño para visualizar y planificar el espacio antes de hacer cambios físicos.
5. Estandariza procesos y cuida la calidad
Estandarizar los procesos productivos mediante la documentación de procedimientos paso a paso, asegura la consistencia en la calidad del producto final y facilita la capacitación del personal. La estandarización también permite identificar y eliminar pasos innecesarios, optimizando el tiempo y los recursos utilizados.
Por otro lado, al implementar un sistema de control de calidad riguroso, es posible identificar y prevenir defectos en los productos o servicios, con el fin de reducir los costos por mermas y reprocesos. Un buen sistema de control de calidad también contribuye a mejorar la satisfacción del cliente y la reputación de la empresa.
6. Fomenta una cultura de mejora continua
Fomentar una cultura de mejora continua en la empresa motiva a los colaboradores a buscar constantemente nuevas formas de mejorar los procesos, productos y servicios. Esto se puede lograr a través de programas de sugerencias, capacitación en soft y hard skills, así como el reconocimiento a las iniciativas innovadoras.
Por ejemplo, al invertir en la formación y capacitación continua de tus colaboradores permiten a tu personal adquirir nuevas habilidades y potenciar su talento, pero sobre todo, mantienen a tu negocio actualizado y competitivo, ante las nuevas tendencias del mercado y los requerimientos de tu sector.
Dentro de este punto también destaca el fomento a un buen ambiente de trabajo donde los empleados se sientan motivados, valorados y respetados, como un factor que contribuye significativamente a mejorar la productividad y el compromiso.
7. Participa en redes de apoyo o en asociaciones
Únete a redes de mujeres emprendedoras y grupos de apoyo empresarial, a través de alguna membresía como la de ASEM, para coincidir con colegas que enfrentan los mismos retos, compartir experiencias, intercambiar ideas y aprender de otras mujeres que han transitado el mismo camino que tú.
En este tipo de espacios, como los eventos y programas que fomenta y organiza ASEM, se fomenta el aprendizaje continuo, que es esencial para el éxito en cualquier ámbito, sobre todo en el camino del emprendimiento. También puedes encontrar otro tipo de oportunidades.
Por otro lado, te sugerimos mantenerte actualizada sobre las últimas tendencias en tu sector, asiste a eventos y talleres especializados, lee libros y artículos relacionados con las perspectivas de tu negocio.
En conclusión, al implementar estas siete claves, como emprendedora puedes mejorar significativamente la capacidad de producción y operación de tu negocio, al buscar nuevas fuentes de financiamiento, optimizar el uso de los recursos, diseñar procesos que sumen a la eficiencia, para lograr mayores niveles de rentabilidad.
Recuerda también que puedes unirte a espacios como este, donde podrás encontrar oportunidades para crecer, ideas para transformar e impulsar tu negocio y acompañamiento para que juntas y juntos construyamos mejores oportunidades para la comunidad de emprendedores en México.
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